Un sueño de mañana...
Llego temprano y mi estomago se aprieta...
Siento que llega alguien y mi respiración se para pensando que eres tu.
Finalmente te veo llegar y espero con ansias cuando me vienes a saludar.
Llegas y me saludas. Lo único que quiero es que te acerques, te olvides del COVID y discretamente (para mantener apariencias) me toques de cualquier manera que me haga saber que me deseas lo mismo que yo y sentir tu piel.
Como deseo conocer el sabor de tu piel, tu boca y como se sientes tus manos en mi cuerpo.
Te veo y te acercas, clavas tus ojos en mi dejándome saber que es mutuo y tu mano toca la mía.
Ya no respiro y mi cara se sonroja. Te sientas en mi mesa y mirandome a los ojos me dices que este fin de semana solo pudiste pensar en mi. Sigues tocando mi mano y ahora mi pierna por debajo de la mesa, como dice la canción.
Te levantas y te vas, dejandome muy excitada.
Pasa el día y es hora de almuerzo, todos salen a almorzar en la cooperativa y tu te quedas porque sabes que yo no iré. Te acercas a mi escritorio (sabes que tienes el tiempo contado) y te sientas frente a mi, tomas mi silla y la acercas a la tuya.
Retiras mi mascarilla y la tuya acercándote más y mas, me tomas la cara y me besas. ¡Si! ¡Me besas! Es un beso apasionado y exquisito. Mientras me besas tu mano entra por mi falda tocando mis muslos para luego desplazando mi ropa interior comprobar lo excitada que me tienes, sintiendo mi humedad y masturbandome mientras me miras a los ojos. Apenas y puedo contener mis gemidos de placer, suena tu alarma y sacas tus dedos de mi entrepierna sin quitarme los ojos de encima y los metes en tu boca y me besas.
Ya llega gente, así que te paras y retiras a tu oficina sin dejarme sentir lo duro que estas.
Abro los ojos y me dices: ¡Hola! ¿Como estas? Y ya estoy de vuelta a la realidad...
Siento que llega alguien y mi respiración se para pensando que eres tu.
Finalmente te veo llegar y espero con ansias cuando me vienes a saludar.
Llegas y me saludas. Lo único que quiero es que te acerques, te olvides del COVID y discretamente (para mantener apariencias) me toques de cualquier manera que me haga saber que me deseas lo mismo que yo y sentir tu piel.
Como deseo conocer el sabor de tu piel, tu boca y como se sientes tus manos en mi cuerpo.
Te veo y te acercas, clavas tus ojos en mi dejándome saber que es mutuo y tu mano toca la mía.
Ya no respiro y mi cara se sonroja. Te sientas en mi mesa y mirandome a los ojos me dices que este fin de semana solo pudiste pensar en mi. Sigues tocando mi mano y ahora mi pierna por debajo de la mesa, como dice la canción.
Te levantas y te vas, dejandome muy excitada.
Pasa el día y es hora de almuerzo, todos salen a almorzar en la cooperativa y tu te quedas porque sabes que yo no iré. Te acercas a mi escritorio (sabes que tienes el tiempo contado) y te sientas frente a mi, tomas mi silla y la acercas a la tuya.
Retiras mi mascarilla y la tuya acercándote más y mas, me tomas la cara y me besas. ¡Si! ¡Me besas! Es un beso apasionado y exquisito. Mientras me besas tu mano entra por mi falda tocando mis muslos para luego desplazando mi ropa interior comprobar lo excitada que me tienes, sintiendo mi humedad y masturbandome mientras me miras a los ojos. Apenas y puedo contener mis gemidos de placer, suena tu alarma y sacas tus dedos de mi entrepierna sin quitarme los ojos de encima y los metes en tu boca y me besas.
Ya llega gente, así que te paras y retiras a tu oficina sin dejarme sentir lo duro que estas.
Abro los ojos y me dices: ¡Hola! ¿Como estas? Y ya estoy de vuelta a la realidad...
Comentarios
Publicar un comentario
Déjame tu comentario