Deseo en cuarentena

 

Como poner en palabras este deseo.
Estas ansias, esta hambre.
Esos recuerdos de los encuentros pre pandemia rebotan en mi mente sin piedad hoy y al mismo tiempo se que no bastarían.
Esa añoranza del beso, de esas manos que acompañan al beso.

Esas manos que tras el beso inician ese excitante recorrido por el cuerpo, trazando un plano de donde esa boca luego retomara el trazo sobre el desnudo cuerpo.

El momento de la primera penetracion, ese instante en que tu erección se abre paso entre el paraíso que se oculta dentro de mis piernas, ese primer gemido, tímido,  suave que luego se transformarán en bramidos de placer sin control.

Pero hoy más que despiadado sexo lo quiero con intimidad en la mezcla, con complicidad de dos personas que las ganas les ganaron y simplemente se rinden al yugo del deseo.

Esas manos que afirman las mías sobre la cabeza entre embestida y embestida, mientras tu boca a centímetros míos jadea evidenciando lo excitado que estas mímicando mi excitación.
Esa boca que entre embestida y embestida me besa.

Ese glorioso, sublime momento en que tus ojos cambian de persona a bestia y tomas mi cintura y sin esfuerzo alguno me acomodas a tu antojo guiándome y poniéndome en cuatro,  llevando mi cara a la cama, dejando mi culo en lo más alto.
Tu mano aun en mi nuca y viene esa embestida en mi coño,  esa posición que me deja sentir hasta lo más profundo de tu embestida y lleva mi excitacion a otro nivel.

Embestidas que si acompañas con tu dedo lubricado y jugando con la entrada de mi ano, simplemente será la gloria y me llenara de ansias por  que me lleves al climax para luego empotrarme,  lenta y tortuosamente para extender ese placer que quiero dure toda la noche.

Miles de posiciones,  miles de perversiones,  cero control....

Eso deseo... eso añoro...