Entradas

Mostrando las entradas de abril, 2021

Rendido de placer para mi placer.

Imagen
  Ese día decidí mostrarte mi lado perverso, a ver como lo manejabas.   Te planteé la idea a ver como te iba y para mi sorpresa aceptaste gustoso.   Nuestra cama tenía esos pilares en las cuatro esquinas, así que decidí dar uso de ellos. Tome una cuerda y las ate a los dos postes de nuestra cabecera.  Te entregue las cuerdas atadas a unos aros, para que alcanzarás a cogerla con las manos tendido en la cama.   Te desnude y tendí dándome  la espalda sobre la cama. Tome el lubricante y deje caer gotas sobre tu cuerpo, que saltaba al contacto de cada gota.   Instintivamente tus manos fueron a las argollas, y el lubricante recorría tu hermosos glúteos.   Mi dedo comenzó a viajar por tu espalda y se perdió entre ellos, masajeando lentamente preparando el área. Te retorcias de placer y decidí ir por más.   Tus manos firmes aferradas, aferradas para soportar las embestidas que lentamente iba aumentando el ritmo y pro...

Una sorpresa por la tarde.

Imagen
  Y una tarde sobre su cama miraba el cielo de su cuarto cuando de pronto se oye el golpe constante y con apuro en la puerta.  Decide ignorarla, no está para nadie hoy.  Pero persiste el golpeteo, una y otra vez.  A regañadientes se levanta ver por la mirilla y su mundo se detiene junto con los latidos de su corazón. Temblorosa toma la manilla de la puerta y lentamente abre.  Ya todo su cuerpo tiembla. Al abrir ve al otro lado de la puerta unos ojos verdes penetrantes acompañados de un hombre de buen porte.  De inmediato siente el piso moverse bajo sus pies. Lo reconoce de inmediato y sin mediar negociación alguna una lágrima cae por su mejilla.  Su mano va sobre la mesada de la cocina, para lograr mantener el equilibrio. ¿Que hace acá? ¿Como? ¿Por qué? Azotan miles de preguntas en su cabeza. Aun el hombre se encontraba al otro lado del dintel de la puerta, sin emitir sonido alguno más que el estruendoso mirar de sus ojos. Su mano izquierda se apoyaba...

La nueva compañera.

Imagen
  Me dieron la instrucción de enseñarte del trabajo. "Ella es Marla" no esté presentaron. saludos cordiales y virtuales. Si, aún encerrados. Partimos con las capacitaciones y me parecías muy simpática y bella. Siempre me he considerado hetero pero algo en ti despertó el hambre lujuriosa en mi, inexplicable. "Será la pandemia" pensé Por fín volvemos a la cooperativa y nos conocimos personalmente. Tu belleza era una oda a todas mis letras de este blog. Tu cabello negro azabache largo ondulado, tomado en una cola que parecía simple pero a mis ojos  enmarcaban con arte del cuadro de tu cara y cuello. Tu piel oliva, esos ojos grises y tu boca, ¡Oh!  tu boca. Ese dia la traías pintada con labial rojo. No se si logre disimular me excitación, senti el fuego en mis mejillas y tú sonreiste. Ese dia y las próximas semanas enteras compartiríamos casi exclusivamente para poder ponerte al corriente con todo. Conversando nos dimos cuenta que nuestros apartamentos eran ...

Mi musa

Imagen
  Su blusa cedió a mis anhelos dejándose caer manifestando la obra maestra que ocultaba bajo de ella. Esos montes dignos de los más bellos poemas ahora estaban frente a mi y mi mente se queda en blanco ante tanto deseo. Sus manos despojaron sus caderas del pantalón dejando solo esa hermosa lencería de encaje que no hacia mas que resaltar y enmarcar sus gloriosas caderas, esas que entre ellas escondían mi más preciado bocado. Simplemente me deje caer de rodillas frente a su presencia,  baje mi mirada para poder traer a mi mente un poco de cordura. Con la delicadeza de un ángel levantó mi cara y se arrodillo frente a mi. ¿Porque semejante ángel se arrodillaria frente a esta simple mortal? Pensé de inmediato.  Sus manos fueron a mi cintura y tomando los bordes de mi polera lentamente me despojan de ella deteniendo el recorrido en mis brazos, dejándolos presos en mi espalda. No iba a luchar, estaba a merced de su antojo y ella lo sabia. Besa mis pechos desnudos suavemente con...

Un Almuerzo entre Vecinos

Imagen
  Nada hacía presagiar el vuelco de ese día. Fue un día normal de confinamiento, si se le   puede llamar normal al confinamiento. Ya llega la hora de almuerzo y de pronto suena el timbre.   Molesta me acerco a la puerta, molesta porque mi almuerzo no consistía en comida, sino que en darme mi merecido placer de medio día. Mi vecino en mi puerta, "Te puedo ayudar en algo" Le pregunto "¿Puedo pasar?" osadamente me pregunta. "Claro" y lo desinfecto según mi protocolo. " En que te puedo ayudar, ¿Quieres   un café?" Le ofrezco cordialmente "Claro, gracias" responde "¿Vives sola?" preguntas con asombro. "Si, ¿qué ocurre?" Ya pensando en llamar a la policía, esto se estaba poniendo extraño "¡ Tus gemidos me vuelven loco! Disculpa lo directo, pero desde un tiempo que no estoy con nadie y tus gemidos... ay! tus gemidos" "¿Que tienen mis gemidos? ¿Te molesta el ruido?" Sonreí pícaramente...